Los indicadores económicos y políticos son en general algo más negativos para el Gobierno este mes que el mes pasado. El Sentimiento del Consumidor pierde cuatro puntos, y aunque la Evaluación de la Situación Económica de España aumenta dos puntos, la evaluación de la situación personal (medida por el Optimismo Personal) pierde tres puntos, de manera que los tres indicadores se mantienen significativamente por debajo del nivel de equilibrio, entre 5 y 18 puntos por debajo, siendo la Evaluación de la Situación Económica de España el indicador más negativo de los tres. La Propensión al Ahorro continúa en el nivel del mes pasado, y la Proporción de Ahorradores se mantiene prácticamente en el mismo nivel también (un punto porcentual por debajo de la de septiembre). En cuanto a los indicadores políticos vuelve a disminuir la Satisfacción con el Gobierno de la Nación, otros dos puntos menos este mes, de manera que vuelve a obtener su valor más bajo desde las pasadas elecciones de 2004 (hay que recordar que ese valor fue de 152 (en una escala de 0 a 200) en mayo de 2004, y es ahora de 112, es decir, muy próximo al nivel de equilibrio, en el que se equiparan los satisfechos con los insatisfechos. Por el contrario, la Satisfacción con el Funcionamiento de la Democracia continúa en un alto nivel, como es habitual (155 en una escala de 0 a 200 puntos), aumentando incluso en dos puntos este mes. Y el resto de los indicadores apenas sufren variaciones significativas este mes. En lo que respecta a la imagen de instituciones, el ranking de este mes es el siguiente: La Policía Nacional (6,4 puntos en una escala de 0 a 10 puntos), la Guardia Civil (6,3), La Corona (6,1), las Fuerzas Armadas (6,0), los Tribunales de Justicia (5,2), los Bancos (5,0), y el Gobierno de la Nación (4,8 puntos en una escala de 0 a 10 puntos). Debe resaltarse el fuerte incremento de valoración de las Fuerzas de Seguridad del Estado y de las Fuerzas Armadas, que incrementan su valoración en cuatro y cinco décimas en el caso de las Fuerzas de Seguridad respecto a la última vez que se preguntó sobre ellas (hace un año) y en cinco décimas en el caso de las Fuerzas Armadas respecto al mes pasado. Las tres valoraciones son las más altas desde hace años. También aumentan su valoración La Corona, los Tribunales de Justicia y los Bancos, de manera que la única institución que recibe la misma valoración que el mes pasado es el Gobierno de la Nación, que lleva tres meses seguidos con la misma valoración, la más baja de los últimos años excepto la de diciembre de 2005, siendo estas cuatro valoraciones las únicas por debajo de los 5 puntos desde las pasadas elecciones de 2004. En cuanto al ranking de personajes públicos, la Reina Sofía recibe este mes la máxima valoración (7,0 en una escala de 0 a 10 puntos), seguida a gran distancia por Felipe González (5,1 puntos), que sigue superando a José Luis Rodríguez Zapatero (4,7), Mariano Rajoy (3,6), Gaspar Llamazares (3,5), y José Mª Aznar (3,4 puntos en una escala de 0 a 10). Por comparación con el mes pasado, Felipe González es el único líder político que gana una décima, mientras que Rodríguez Zapatero y Aznar mantienen su valoración del mes pasado, y Rajoy y Llamazares pierden una y tres décimas respectivamente. En resumen, puede afirmarse que los indicadores políticos continúan siendo algo más negativos (o menos positivos) para el Gobierno que los del mes pasado, continuando una tendencia que dura ya muchos meses, y que contrasta con los valores extraordinariamente positivos de este Gobierno cuando inició su andadura en mayo de 2004. Esta tendencia se ve una vez más confirmada por la estimación de voto, que este mes muestra una diferencia de solo un punto porcentual entre el PSOE y el PP, lo que implicaría un empate si realmente este fuese el resultado de unas elecciones generales. Por comparación con los resultados reales de 2004, el PP perdería 7 décimas porcentuales, mientras que el PSOE perdería 3,2 puntos porcentuales. IU y los nacionalistas de centro y derecha perderían 2 y 6 décimas porcentuales, mientras que los nacionalistas de izquierda ganarían 2 décimas y los “otros” partidos ganarían tres décimas. Como consecuencia, la abstención estimada sería 4,2 puntos porcentuales superior a la abstención real en 2004, lo que sugiere una vez más que la menor participación electoral favorece al PP, y viceversa, como se ha demostrado en las últimas elecciones de 2004, 2000 y 1996.
Problemas más Importantes para España
Los principales problemas que tiene España, según opinan los españoles, son el empleo y el paro (citados en primer, segundo o tercer lugar por un 41% de entrevistados), seguido de la inmigración y la vivienda (39% en ambos casos), y del terrorismo (23%). El terrorismo ha disminuido significativamente en los últimos meses, pero ha aumentado la preocupación por la inmigración y la vivienda, así como también por la corrupción que ocupa el quinto lugar este mes (Véase el gráfico que se incluye en Indicadores más significativos en la página de Inicio).
Actuaciones recientes del Gobierno
Utilizando una escala de cinco puntos, desde “totalmente en desacuerdo” a “muy de acuerdo”, se pidió a los entrevistados que indicaran su grado de acuerdo o desacuerdo con algunas actuaciones recientes del Gobierno de Zapatero. El máximo grado de acuerdo es, igual que en septiembre, el que se muestra respecto al “carné por puntos” (casi tres cuartas partes de los entrevistados se muestran de acuerdo), casi la mitad de los entrevistados están de acuerdo con las relaciones con la Unión Europea, y un tercio están también de acuerdo con la recientemente aprobada Ley de Dependencia. Pero se observa una opinión muy controvertida con leve tendencia al acuerdo respecto al acuerdo con el Reino Unidos sobre Gibraltar, y con leve tendencia al desacuerdo en relación con “las negociaciones con ETA y Batasuna”, con “el trato a las víctimas del terrorismo de la ETA”, y con los acuerdos (del Gobierno) con los partidos nacionalistas, pero se observa un claro y fuerte desacuerdo con la política de inmigración (un 57% están en desacuerdo y solo un 30% están de acuerdo con la política del Gobierno hacia la inmigración).
La Política hacia la Inmigración
La inmigración es ya el segundo problema más importante para los españoles, después del paro, tanto cuando se tiene en cuenta el primer problema citado como cuando se tienen en cuenta los problemas citados en primer, segundo o tercer lugar conjuntamente, si bien en este caso es citado en igual proporción que la vivienda y solo a dos puntos porcentuales del paro. Aparte de esta consideración, se ha preguntado por lo que el Gobierno de España debería hacer en relación con los inmigrantes que entran de forma clandestina en España. Cada entrevistado podía dar más de una respuesta. Un 44% afirma que “se les debe devolver a su país de origen si existen tratados de repatriación con ese país”, pero un 29% adicional afirma que “se les debe expulsar de España tanto si se sabe como si no se sabe el país del que proceden”. Un 20%, sin embargo, afirma que “se les debe dar permiso de trabajo”, y proporciones inferiores al 20% sugieren “concederles la tarjeta sanitaria”, “permitir y obligar a sus hijos a ir a la escuela”, “dejarles en un centro de acogida indefinidamente si no se les puede devolver a su país de origen”, y “empadronarles”. Y proporciones inferiores al 7% mencionan “dejarles en libertad después de 40 días si no se sabe de qué país proceden”, “darles un salario social si no tienen trabajo”, “concederles la nacionalidad española”, “proporcionarles una vivienda social mientras no puedan alquilar o comprar una”, y “permitirles votar en las elecciones municipales”.